¡Hola! Los que me seguís por redes sociales habréis visto que ayer tuvimos sesión de fotos. En concreto tuvimos una sesión cake smash y para esta sesión, como el mismo nombre indica, se necesita una tarta.
Como no quería ponerme a hacer una de 0 (bizcocho, cobertura, decoración…) opté por hacer una versión de la naked cake fácil y en este post os cuento cómo la hice.
Las tartas naked cake son unas tartas compuestas por varios pisos y sin cubrir, la mayoría de ellas suelen llevar frutas o flores para decorarlas, pero en este caso, y como era para una sesión de fotos infantil, utilicé confeti de azúcar de colores.
Os cuento lo que se necesita para hacerla:
- 1 paquete de bizcochos para tartas (yo usé solo un paquete, pero se pueden usar más)
- 1 tarrina y media de queso crema (lo cogí light y el gusto del frosting no me gusta tanto…)
- 1/2 bote de azúcar glass.
- Confeti de colores para decorar (o fresas, moras, flores…)
Como el bizcocho ya lo tenemos hecho, solo tendremos que hacer el frosting. En este caso escogí el frosting que se suele usar para la carrot cake o la red velvet, debo deciros que la receta buena lleva mantequilla, pero esta vez hice una versión más light.
Ponemos el queso crema en un bol y lo batimos un poco con la batidora, posteriormente añadimos el azúcar glass y seguimos batiendo hasta que estén los dos ingredientes unidos, obteniendo así el frosting.
Colocamos una de las bases de bizcocho y untamos frosting por encima, una vez tengamos toda la superficie llena de frosting ponemos encima otra base de bizcocho y repetimos la operación.
Una vez tengamos la tarta montada, la dejaremos enfríar durante un par de horas para que el frosting se enfríe.
Por último decoraremos la tarta al gusto y… ¡ya tenemos nuestra naked cake lista!
¡Espero que os guste la idea!
